Las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Entre Ríos y algunas del norte, entre las más afectadas.
Casi el 60 por ciento de la superficie del país se encuentra afectada por un marcado déficit hídrico, con un panorama de «sequía extrema y excepcional» hasta estados «anormalmente secos», según lo revela un estudio.
El Sistema de Información sobre Sequías para el Sur de Sudamérica (SISSA), es una organización internacional que monitorea los eventos climáticos, y confirmó a través de este relevamiento la grave situación de la Argentina.
De hecho, y con datos tomados durante el último trimestre, SISSA indicó que el 59,8 de la superficie argentina está afectada por una sequía de variada intensidad. En tanto, el 40,1 por ciento restante presenta una condición «no seca». Además, al llevar esas cifras a las áreas afectadas, el informe habla de una extensión de casi un millón y medio de kilómetros cuadrados con déficit hídrico.
En el desglose, el 10 por ciento atraviesa una «sequía excepcional»; el 14, una «sequía extrema»; el 11, una «sequía severa»; el 12, una «sequía moderada», y el 11, una situación «anormalmente seca», mientras que el 40 por ciento no está alcanzado por dicha emergencia hídrica.
En tanto, y con respecto al territorio bonaerense, atraviesa una situación grave porque el 75 por ciento de su superficie está en la etapa de «sequía excpecional a extrema».
El panorama es más grave en Santa Fe y Entre Ríos, ya que según el informe de SISSA casi toda la superficie de ambas provincias está en un panorama crítico. Córdoba, por su parte, presenta una situación variable, de acuerdo a sus regiones, con el 33 por ciento de la superficie bajo una «sequía moderada».
En cambio, la situación varía en el litoral, donde Corrientes presenta el 86 por ciento de su territorio con una situación de sequía «entre excepcional y extrema», y algo similar ocurre en el norte con las provincias de Chaco y Formosa, ubicadas casi en los mismos valores.
En Salta, Jujuy, Tucumán, Misiones y Santiago del Estero la situación mejora. A modo de ejemplo, en la última provincia solo un 2,9 por ciento de su área reviste una situación de sequía extrema, mientras que en Misiones, el 53,1 de su área se encuentra bajo una buena condición hídrica.
Por otra parte, en la zona cordillerana, Mendoza es la provincia que más gravedad reviste, con el 50 por su ciento de su territorio atravesando una situación de sequía, mientras que entre los distritos patagónicos, Neuquén presenta la peor condición con el 35 por ciento de su área con algún grado de faltante de
humedad.
Según la ONU, la sequía puede describirse como «el fenómeno que se produce cuando las lluvias han sido considerablemente inferiores a los niveles normales registrados, causando un agudo desequilibrio hídrico que perjudica los sistemas de producción de recursos de tierras».
Fuente: NA