Salvador Ramos y tenía 18 años. Había exhibido fotos de armas en sus redes sociales y ya le había disparado a la gente desde un auto con balas de fogueo.
El atacante que ingresó a la escuela primaria de Robb, en la ciudad de Uvalde, Texas y mató a 21 personas (19 menores y dos adultos) se llamaba Salvador Ramos y tenía 18 años.
Ramos era alumno de la Uvalde High School y, antes de la masacre, solía publicar fotos de armas en sus redes sociales, algunas de las cuales comenzaron a circular por Internet apenas ocurrida la masacre.
En esas fotos, que fueron publicadas en el mes de abril, puede verse al joven con un fusil y un cargador.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, precisó que el muchacho llegó hasta el colegio en auto y «disparó y mató, de manera horrible e incomprensible». Luego, corrió a atrincherarse en el edificio, donde murió abatido por la policía.
Santos Valdez, uno de los amigos del homicida desde los primeros años en la escuela, contó al Washington Post que Ramos fue intimidado por otros estudiantes y, a veces, también comenzó peleas. “Lo intimidaron peor en la escuela secundaria”, acotó.
También reveló que solían jugar videojuegos como “Fortnite” y “Call of Duty”. Pero luego Ramos cambió, dijo Valdez.
Valdez también contó que la actitud de Ramos había cambiado mucho en el último y que por placer se provocaba cortes en la cara con un cuchillo y que había disparado a personas al azar con una pistola de aire comprimido desde un auto.
Hace poco menos de un año, Ramos publicó fotos en las redes sociales de rifles automáticos que “tendría en su lista de deseos”, dijo Valdez. Hace cuatro días, publicó imágenes de dos rifles a los que se refirió como “mis fotos de armas”.
Ramos compró el arma utilizada en el ataque inmediatamente después de cumplir 18 años, que fue el 16 de mayo, según informó al Washington Post una persona vinculada a los primeros hallazgos de la investigación.
Fuente: NA